Petra, la cisne enamorada

Ni la navidad la separa del amor de su vida

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Es oficial que soy fan de Petra. Se ha convertido en una celebridad en Alemania, es una hembra cisne de plumaje negro, que se enamoró de un bote de pedales en forma de cisne blanco, y pudo pasar la navidad a un lado de su amada pareja, y según psicólogos de animales (¿los hay? Wow!) será difícil separarla de su amado. A webooo Petra, vieja tenias que ser, somos bien apasionadas chingá.

La cisne llego este verano a Münster, y de inmediato se dedicó a nadar exclusivamente alrededor del bote de dos plazas, que tiene la forma exacta de un cisne. Bautizada como Petra, el ave llamo la atención de los medios locales y nacionales, pero absorta en su amor, hizo caso omiso de los fotógrafos que siguieron su idilio en el lago Aasee, en el centro de Münster. Según una publicación, cuando llegó el invierno y ya no hubo actividad para el cisne de plástico, su propietario se vio presionado para no separar a la insólita pareja, y aceptó que el bote fuera llevado a un estanque del zoológico local.
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Petra anadeo detrás de su amado y días antes de navidad ambos fueron mudados a una habitación en el recinto para pingüinos, ya que a la cisne se le infectó una pata y fue necesario darle tratamiento. Así que la pareja pasó su primera navidad junta y en instalaciones por demás cómodas. Según empleados del zoológico, Petra siempre esta cerca del bote de pedales y a veces se acomoda en la zona hueca que hay debajo del bote. ¡Es un amor! !Lindura!
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La sociedá no entiende que Petra lo considera su pareja así que insisten en hacerla entender por lo que en Marzo le presentarán varios cisnes machos para ver si se le antoja aparearse con un cisne real pero expertos han dicho (¿los psicólogos?) que ni se les ocurra, que no gasten energías en eso porque lo mas probable es que Petra ahuyente a cualquier otro cisne y de ocurrir esto el zoológico estaría dispuesto a permitirle pasar otro verano inmersa en su relación. El zoológico ha recibido muchas cartas de los defensores del amor de Petra y hasta se le compuso y una balada llamada “balada del cisne” Eso me recuerda al revuelco que se armó con el asunto de los pingüinos gays y la iniciativa de los activistas a que no los presionaran y dejarlos vivir su amor “diferente”. Pues yo estoy a favor de que Petra viva feliz su amor a pesar del que dirán. A la gente nunca le daremos gusto.